Tu perro puede sufrir síntomas de deshidratación por diferentes motivos, desde enfermedades que causan vómitos y/o diarrea, enfermedades renales o por un golpe de calor. A pesar de lo común que parezca, la deshidratación es algo muy grave, que requiere tratar de inmediato y que puede llegar a causar la muerte del perro.
¿Cómo identifico si mi perro sufre deshidratación?
Los principales síntomas de la deshidratación son:
- Boca seca
- Debilidad general
- Pérdida de tono
- Piel seca (se puede comprobar si estirando un poco de la piel del perro, ésta tarda más de lo normal en volver a su sitio)
La deshidratación es especialmente grave en cachorros y perros mayores.
¿Cómo tratar la deshidratación de mi perro?
Recomendamos siempre acudir a un veterinario en caso de que tu perro presente algún síntoma ya que lo habitual es reponer estos fluidos de manera intravenosa, para lo que el veterinario colocará una vía y deberá estar ingresado entre 24 y 48 horas.
¿Cómo evitar la deshidratación de mi perro
- Asegúrate de que tu perro tenga siempre, y que esta esté limpia y fresca. Esto es especialmente importante en los días más calurosos.
- No lo dejes NUNCA en un coche cerrado al sol, intenta que cuando estéis en el exterior en días calurosos esté siempre a la sombra y evita el ejercicio intenso en las horas de más calor.
- Presta atención a los síntomas de deshidratación que hemos mencionado, especialmente en los días de calor, y acude al veterinario ante cualquier síntoma.
- Si crees que tu perro puede estar sufriendo deshidratación puedes ofrecerle agua siempre que no presente vómitos, mantenerlo a la sombra si sospechamos de un golpe de calor y acudir inmediatamente al veterinario.